ERRORES COMUNES EN LA ALIMENTACIÓN DE LOS GATOS

gato comiendo plantas

En la alimentación de los gatos solemos cometer algunos errores. Aún cuando se trata de nuestra propia alimentación cometemos errores, sobrepasamos algunos límites o a veces no comemos lo suficiente.

Al tener un gato de mascota nosotros nos volvemos los responsables de lo que comen, aún cuando nos mostremos menos que expertos en nuestra alimentación, debemos hacer como que sí sabemos ser los responsables de la relación humano-gato.

 

Sabemos que ellos pueden ser lo suficientemente independientes como para encontrar su comida…la mayoría de las veces.

 

El sitio Pets Web MD recopiló los testimonios de nutriólogos animales y médicos veterinarios para ayudar a identificar los errores más comunes que hacemos al alimentar a nuestros gatos:

 

1.Darles demasiada comida.

Los gatos “fuertesitos” se pueden ver lindos, pero en realidad la obesidad los vuelve más propensos a diabetes, artritis y problemas en vías urinarias. No hay nada lindo en eso.  Debido a que muchos gatos llevan una vida sedentaria (Garfield, por ejemplo) es fácil darles de comer de más.

Los profesionales recomiendan entre 55 y 77 kcal por cada kilogramo de peso.

 

De cualquier manera siempre es mejor orientarnos con nuestro veterinario para saber si está en su peso ideal.

 

gatos comiendo

 

 

2.Sólo darles comida seca.

Los gatos provienen de ambientes secos, por lo que no están acostumbrados a tomar agua por gusto (esto les provoca una orina particularmente concentrada), por lo que si no implementamos comida con mucha agua, van a ser más propensos a infecciones en vías urinarias debido a esa falta de líquidos. No nos esperemos a que estas infecciones lleguen para entonces sí “tapar el pozo con el niño caído”, mejor seamos proactivos en su cuidado.

 

De acuerdo a Lisa Pierson, médico veterinaria de California enfocada a nutrición felina, la comida húmeda está formada por cerca de 78% de agua, mientras que la seca sólo entre el 5 y el 10%.  

 

3.Creer que el ajo elimina parásitos.

En algún punto de la vida comenzó el rumor de que el ajo ayudaba a eliminar tenias (esos gusanitos con forma de grano de arroz que salen de la retaguardia de nuestro gato). Por favor, no lo hagamos.

El mito empezó porque se decía que el ajo fresco servía para eliminar pulgas. Pero ¡oh sorpresa! En realidad no elimina pulgas ni ayuda con las tenias, sino que disminuye los glóbulos rojos. #TodoMal.

 

 

4.Querer volver a nuestro gato vegetariano o vegano. Este punto es taaaan importante que hasta les hicimos una nota al respecto, pero por si las dudas, se los recordamos.

Los gatos son forzosamente carnívoros. La taurina es un aminoácido que sólo se encuentra en tejidos y carne animal que, si el gato no lo consume, puede provocarle fallas cardíacas, ceguera y hasta la muerte.

 

Se puede buscar complementar con suplementos alimenticios, pero de acuerdo a Linda Case, autora de libro The Cat: Its Behavior, Nutrition, and Health, hacerlo de este modo es arriesgar demasiado su salud. Por favor, Fan Animales, no lo hagan.

 

gato comiendo

 

5.Asumir que la comida casera es más sana. En otra nota platicamos sobre la posible teoría de conspiración entre los Illuminati y los veterinarios para recomendar siempre la comida comercial. Pero es que, muchos dueños, en un afán de buscar ser más conscientes con la ecología o con la nutrición de su gato, les preparan comida casera.

El problema es que no somos expertos en nutrición, por lo que tal vez omitamos la cantidad correcta de calcio, o la proporción adecuada de fósforo que suelen obtener de los huesos de sus presas.

Pequeñas variaciones en aceites de pescado o vitamina B1, que pueden sonar sanas, en realidad terminan siendo perjudiciales para su salud,

Sabemos que lo buscan hacer por ayudar, pero tristemente termina siendo el efecto contrario.

 

gato comiendo plantas

 

Ya recorrimos contenido, cantidad y mitos. Confiamos en que con esto nos volvamos dueños más conscientes y responsables en la nutrición de nuestros gatos.