¿DIETA BARF? AQUÍ TE EXPLICAMOS TODO LO QUE NECESITAS SABER PARA EMPEZAR

dieta bart

 

Poco a poco, la dieta BARF se ha ido popularizando entre los dueños de perros y (sí, aunque no lo creas, entre algunos gatos también ?).

 

¿Qué es lo especial de esta dieta? ¿Los mitos acerca de ella son reales? Si cambias la dieta de tu animalito a BARF, ¿estarás haciendo lo correcto o es una total equivocación?  Traaaaaanqui, no todo es tan confuso como parece, pero, ok, sí tenemos que empezar a dejar algunas cosas en claro. 

 

dieta barf

 

Primero lo primero, ¿qué es la dieta BARF

 

La dieta BARF se basa en alimentar a animales con comida natural, de ahí nacen sus siglas: Biologically Appropriate Raw Food (comida cruda biológicamente apropiada). Esto significa: NADA de croquetas, puros alimentos reales y crudos. Los porcentajes de la dieta BARF clásica suelen a ser: 60% huesos carnosos, 15% vegetales y verduras (triturados), 10%-15% vísceras y órganos. El resto se le puede añadir de complementos como la alfalfa, aceite de pescado, frutos secos (como pasas, arándanos), entre otros.

 

“Oye, Fan Animal, ¿y si se enferma Firulais por andar comiendo chayotes?”


No, Patricio, la dieta BARF no es peligrosa.

 

Antes de empezar, es súper importante que sepas que el mayor  “contra” de este tipo de dieta, en realidad es solo un mito que debe ser desmontado. Se piensa que la comida cruda puede hacerle daño a tu perrito, pero gracias sus enzimas y un aparato digestivo diseñado para procesar alimento crudo, esto es algo de lo que no deberás preocuparte. Como te comentamos, los perros descienden de lobos, y te apostamos lo que quieras a que lo último que comían en su hábitat eran croquetas, esto significa que su cuerpo está diseñado naturalmente para la dieta BARF.  

 

dieta bart

 

De hecho, la dieta BARF es excelente para la salud de nuestros animalitos. ¿Recuerdas la infinidad de veces que el doctor te ha dicho que dejes de lado los alimentos procesados y te enfoques en comer, pues, comida real (bye, Maruchan), algo parecido ocurre con nuestros perrhijos