LO QUE LA NARÍZ DE NUESTRO PERRO NOS DICE DE SU SALUD

nariz de nuestro perro

Es muy conocido que nos digan que podemos saber si un perro está sano basándonos en el estado de su nariz: si está seca, húmeda o fría. Aunque esa última también pueda ser que está escapando de una despreciable señora con cabello bicolor que lo quiere convertir en un abrigo.

 

Este tema siempre lo tomamos como ley, aunque rara vez nos detenemos a preguntarnos qué tan verdad es.

 

Así que, ¿en verdad podemos conocer el estado de salud de un perro por la condición de su nariz?

 

Nope.

 

*Suena música dramática*

 

 

labrador negro

 

 

De acuerdo a Jenna Stregowski, veterinaria y gerente del Inman Park Animal Hospital de Atlanta, un perro enfermo puede tener la nariz húmeda, así como un perro sano puede tenerla seca.

 

La nariz de los perros se mantiene húmeda gracias a que la están lamiendo constantemente. Esto les ayuda a que esté más sensible a aromas así poder determinar la dirección de los mismos.

 

Por ejemplo, si se van despertando, lo más probable es que tengan la nariz seca porque no estuvieron toda la noche lamiéndola. A menos de que soñaran que se comían un rico cono de helado, pero es menos probable.

 

 

cachorro mirando a su dueño

 

 

Más allá de la nariz, debemos fijarnos en falta de energía, diarrea o vómito. Esos son alguno síntomas reales que debemos de atender de inmediato con nuestro veterinario, no la nariz seca.

 

Conocíamos a alguien que, cuando un niño o alguien más decía que el perro estaba enfermo porque tenía la nariz seca, lo único que hacía era humedecer sus dedos con saliva, mojarle la nariz al perro y decir “listo, ya está bien”. Nos reíamos, pero tal vez esa persona sabía algo desde entonces.

 

El origen del mito

 

La teoría que nos suena más lógica del por qué la gente cree que esto es cierto, es que hace tiempo el “moquillo” era una enfermedad muy común entre perros y uno de los síntomas de esta enfermedad era la inflamación y resequedad de la nariz, por lo que una nariz fresca y húmeda era señal de que nuestro perro estaba bien.

El moquillo aún llega a darse, pero en mucha menor medida que antes gracias a vacunas.

 

En una nota no relacionada: Por favor, vacunen a sus perros.

 

 

perro lamiendo su nariz

 

 

En conclusión, no usemos el estado de su nariz como guía máxima sobre si debemos llevarlo al veterinario o no. A menos que tenga una lesión en la nariz, sí usémosla como guía 😛